Imaginemos que unos ingenieros han construido una autopista estelar de miles de años luz de longitud (aunque de apariencia de asfalto de siempre), y que avanzamos por ella por ella rumbo a la luna, los planetas, las estrellas etc…
Eso sí, con un combustible infinito, y pisando siempre a la misma velocidad.
Primer objetivo; La luna.
La Luna puede parecer cercana. La vemos brillar cada noche sin necesidad de ningún instrumento y a veces da la sensación de que podríamos tocarla. Pero nada más lejos de la realidad. La luz que vemos de la Luna tarda 1,3 segundos en llegar a nosotros, es decir, la vemos tal y como era hace 1,3 segundos. Se encuentra a una distancia media de 384.402 kilómetros —356.000 km. en el perigeo (lugar de su órbita en el que más cerca se encuentra de la Tierra) y 406.000 km. en el apogeo (momento en el que lo hace más lejos)—; distancias que comienzan a escapar de nuestra comprensión.
Distancia Tierra – Luna y tamaños a escala real de los planetas del Sistema Solar y la Luna (Imagen de dominio público?

De hecho, cabrían todos los planetas (incluida la Tierra) y todavía quedaría hueco para meter a Plutón y algún que otro planeta enano más.
¡Vamos allá! Rumba a la luna.
Si no tienes prisa podemos viajar a una velocidad de 100 km. De este modo, tardaríamos nada menos que 160 días en llegar a la Luna. 5 meses.
Si tenemos algo más de prisa y viajamos a una velocidad de 120 km/h, entonces tardaríamos 3.200 horas en cubrir los 384.000 kilómetros. Eso significa un total de 133 días de conducción sin parar, más de 4 meses.
¿Cuánto tardaríamos en llegar a otros planetas?
Lo cierto es que el viaje a la luna se haría un poco largo. Imaginemos que piso a fondo y que alcanzo los 193 km/h. Llegar a Marte al planeta más cercano, representaría 134 años de viaje.
A esos 193 km/h de mi coche alcanzaría Júpiter en 459 años.
Saturno está casi el doble de distancia: 842 años de conducción ininterrumpida.
Si no bajara del coche ni para ir al aseo, llegaría finalmente a Neptuno en 2.497 años. Así que indudablemente resulta una empresa un poco infructuosa alcanzar las estrellas con un coche, por muy aventurero que se sienta uno.
Ahora "un poco" más allá.
¿Te imaginas tener que ir en coche a la estrella más cercana a nosotros (Próxima Centauri) que está 120 millones de veces más distante que nuestra querida Luna?
Eso son poco más de 4 años-luz.
¿Y a Andrómeda, nuestra galaxia vecina, que se encuentra a más de dos millones de años luz de nosotros?
Fuentes;
astroafición.com
Xataca







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