Respetar así las diferencias individuales de todos y cada uno de los niños, es prácticamente imposible en un sistema tradicional. No imagino al pobre maestro con tremenda carga en un aula de 30 niños. Algo que, por el contrario, es perfectamente posible con un sistema Montessori ya que los niños trabajan solos (es un autoaprendizaje) cada uno en lo que corresponde al nivel que están, o en pequeños grupos o equipos, pero nunca los 30 al mismo tiempo aprendiendo lo mismo el mismo día... El docente no es quien tiene que resolver este problema. Es una cuestión de métodos realmente. Es demasiado pedirle al docente tradicional que, con su método, logre la individualización educativa que los niños requieren, simplemente no va a lograrlo porque excede a lo que humanamente es posible. No se trata de exigirle a los maestros, sino de aplicar mejores métodos.
Fuente; Educación Montessori.







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