Un pájaro carpintero (Picidae spp.) posee una lengua extraordinariamente larga, la cual se enrolla alrededor de su cráneo. Este mecanismo singular protege su cerebro al golpear árboles u otras superficies duras.
Además de su lengua, otros factores contribuyen a proteger el cerebro del ave, los cuales son:
Los músculos del cuello súper fuertes amortiguan el impacto, reduciendo el riesgo de daño cerebral.
Las placas del hueso esponjoso en el cráneo actúan como un casco de protección, brindando protección adicional. Esta estructura única les permite resistir golpes fuertes.
El líquido cefalorraquídeo rodea su cerebro. Este líquido, junto con otros factores mencionados, evita que el pájaro carpintero lastime su cerebro al picotear con una fuerza > 1,000 g.
Fuente; Naturaleza.
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